"No tratéis de evitar las ocasiones de ejercer vuestro control. Y no faltan esas ocasiones donde podéis aprender a resistir el hambre, la sed, el calor, el frío, la fatiga. No se trata, evidentemente, de vivir en las privaciones, ni tampoco de convertirse en yoguis, no. Pero observad: en general, aquél que tiene hambre o sed, se precipita para encontrar inmediatamente algo que comer o beber, y si no lo encuentra al momento, se queja, murmura, se enfada.
Observaros y constataréis que en todo tipo de circunstancias, no soportáis no poder satisfacer pronto vuestros deseos, vuestras apetencias, e incluso vuestros caprichos. Entonces, ¿cómo vais a resistiros a la cólera, a los celos, al odio, al deseo sexual que se imponen con mucha más violencia? Por más que sepáis que es mejor resistir, y por más que tratéis de hacerlo, si todavía no habéis aprendido a reforzar vuestra voluntad por medio de ejercicios más fáciles, no lo conseguiréis."
Maestro Omraam Mikhaël Aïvanhov

Comments